E l T e r r o i r

“El vino nace de la tierra y está íntimamente ligado al suelo y a las raíces, las que emergen del sustrato y las que se enhebran con el sudor de las gentes”

El río que...

S e h i z o v i n o

Las vides que sustentan la esencia de Siluvio nacen en lo que fue el cauce del antiguo río Ibias.
El suelo que las sostiene aún conserva los sílices centenarios de los cantos rodados tatuados por el paso de la corriente.
Junto a los esquistos y lajas de pizarra logran conformar una diversidad de suelo superficial que llama la atención.

NUESTROS SUELOS

U b i c a c i ó n

Las viñas que dan vida y esperanza a Siluvio nacen en el municipio occidental asturiano de Ibias, un lugar de clima singular y distinto al del resto de la región: se trata del área donde menos llueve y más horas golpea el sol a lo largo del año. Sus empinadas laderas sostienen una tradición que se remonta a tiempos inmemoriables.

Características del Terreno

El sol

El concejo de Ibias tiene las más altas temperaturas, más horas de luz y recibe más horas de sol del Principado de Asturias.

De ahí nuestra razón de estar en esta ubicación. 

IBIAS, EL SOL DE ASTURIAS

La Lluvia

Asturias es una región caracterizada por sus altos niveles hídricos. Pero nuestro concejo (Ibias) es el lugar con menos precipitaciones por metro cuadrado en el periodo vegetativo de la vid (abril / septiembre). Creando un microclima único para el cultivo de la vid en Asturias.

La Vaguada

Los viñedos se ubican en una vaguada aterrazada con forma semicircular, similar a un antiguo anfiteatro romano, creando un paisaje de belleza singular. Pendientes entre el 45% y 60 % dan sentido a esta viticultura heroica. Las vides ocupan 7,5 hectáreas, por lo que es la mayor extensión vitivinícola del Principado de Asturias.

Un pequeño río que serpentea a los pies del viñedo y la bodega le dan una personalidad única.

El Subsuelo

Los subsuelos son franco – franco arenosos con un gran porcentaje de arenas que hacen que las raíces profundicen y se esfuercen en conseguir la ansiada humedad para subsistir. De esta manera se transmite toda la complejidad de los oligoelementos y de los perfiles del subsuelo a nuestro fruto.